La Ecotopía es un subgénero de la literatura utópica que imagina sociedades ideales basadas sobre principios ecológicos y sostenibles. El nombre procede del libro precursor de esta nueva corriente, Ecotopía, de Ernest Callenbach (1929-2012), publicado en 1975. Con su estilo periodístico, Callenbach describe la sociedad simultáneamente utópica y ecológica que William Weston, un periodista estadounidense, encontró en este país imaginario, Ecotopía, surgido tras una segregación de Estados Unidos. Cada capítulo del libro consta de uno de los artículos que Weston escribe, seguido de un extracto de su diario íntimo.
Este trabajo incita a la sociedad de la época a imaginar cómo un enfoque diferente de la ecología podría constituir la base de un modelo de sociedad ideal. Asimismo, Callenbach inspira a otros autores a imaginar utopías ecológicas.
En los Setenta aparecieron más ejemplos de esta corriente, de los que quizá los más famosos son Woman on the edge of time, de Marge Piercy (n. 1936), en 1976, y The Wanderground, de Sally Miller Gerahart (1931-2021), en 1978.
Utopía, la sociedad ideal
El término «utopía» fue acuñado por Tomás Moro (1478-1535) en su libro Utopía, en 1516. Procede del griego «ou-topos», que significa «ningún lugar» o «lugar que no existe». El concepto de sociedad ideal y armoniosa se remonta ya a Platón, que describe su república ideal en la obra La República, escrita en torno al año 370 a.C.
La diferencia principal que aporta Ecotopía es la idea de que esta sociedad ideal debe basarse en sistemas ecológicamente sostenibles. Generalmente, la comunidad descrita en estos libros se basa en sistemas políticos alternativos (como la democracia directa) y vive en entornos rústicos, a menudo no urbanizados.
La ficción climática
Son muchas las obras recientes que tienden a mezclar elementos utópicos con escenarios distópicos. Se podría decir que el género de la ficción climática parece oscurecerse, en reflejo a las preocupaciones de la sociedad contemporánea sobre el cambio climático.
Entre los libros más populares de los últimos años con un escenario ecológico distópico destaca History of the Bees, de Maja Lunde (n.1975), publicado en 2015. Si bien el futuro imaginado es pesimista (el mundo devastado como consecuencia del colapso que supondría para el planeta la desaparición de las abejas) también se puede captar una nota de esperanza, evocando la capacidad humana para adaptarse y evolucionar.
Otro subgénero cli-fi muy similar a Ecotopía es SolarPunk. Surgido alrededor de 2010 como reacción al ciberpunk, se trata en realidad de una mezcla de ciencia ficción y literatura especulativa, aunque tiene muchas similitudes con Ecotopía. De hecho, ambas corrientes se centran en futuros ecológicamente sostenibles, pero con matices diferentes.
Si bien Ecotopia hace hincapié en las tecnologías de bajo impacto y «naturales», SolarPunk abraza la tecnología avanzada (siempre que sea sostenible). Asimismo, SolarPunk contrasta la estética rústica de Ecotopía con un entorno futurista y urbano con elementos Art Nouveau.
Como ejemplo de esta corriente cabe citar New York 2140, de Kim Stanley Robinson (n.1952). La novela, ambientada en una Nueva York afectada por la subida de las aguas debido al cambio climático, explora temas como la adaptación y la resiliencia. Más concretamente, la novela aborda cómo se modifican los edificios y el transporte para adaptarse a la nueva situación.
Relevancia e impacto en la sociedad contemporánea
Por lo general, las obras de ficción climática han estimulado el debate público sobre el cambio climático y sensibilizado a los lectores al incitarles a imaginar escenarios futuros afectados por las consecuencias de nuestras acciones cotidianas.
Otro aspecto es su vertiente emocional y moral. De hecho, estos libros suelen tener un fuerte impacto emocional, ayudando a la gente a procesar sentimientos complejos como la ansiedad ecológica. También exploran soluciones innovadoras a los problemas climáticos, estimulando la investigación y la innovación de tecnologías sostenibles.
Asimismo, en estas novelas se suele dar voz a las comunidades marginadas, las más vulnerables al cambio climático. Uno de los libros más emblemáticos en este sentido es Flight Behavior, de Barbara Kinglsolver (n. 1955), publicado en 2012. Los temas principales de la novela son el impacto del cambio climático en las comunidades rurales y la concienciación medioambiental combinada con la responsabilidad individual.
Además, las novelas de ficción ecológicas pueden ejercer presión para cambiar las leyes, estimulando el debate sobre las leyes de sostenibilidad y promoviendo la idea de una sociedad ecológicamente responsable.
