Bananas Chiquita Brands

Chiquita Brands financió a paramilitares en Colombia

Author
Emy Daniela Díaz
Visual curator
Orlando Ruta

Historia de Chiquita Brands

Esta empresa multinacional se dedica a la producción y distribución de bananas. Su historia tiene más de 150 años. Inició en 1870 cuando el Capitán Baker navegó desde Jamaica a New Jersey con 160 racimos de bananas que no perecieron. Así, en 1885 nace la asociación del Capitán Baker y Andrew Preston al crear la Boston Fruit Company. Después en 1899 se fundó con el nombre de United Fruit Company por la fusión con una empresa ferroviaria. En 1903 empezaron a cotizar en la bolsa de valores de New York.

¿Cómo operó Chiquita Brands en América Latina?

Según los datos de la BBC, la United Fruit Company construyó una red de enormes plantaciones desde Guatemala hasta Colombia. Pasando por Honduras, El Salvador, Belice, Nicaragua, Costa Rica y Panamá. Incluía islas del Caribe como Cuba y Jamaica.

Carlos López Flores CEO Chiquita Brands
Carlos López Flores CEO Chiquita Brands — Foto Laura Marroni

Su capacidad para operar en muchos casos superaba a la gubernamental. Además de ofrecer empleo a miles de personas, como dueña de miles de hectáreas de tierra fue aliada cuando lo requería del gobierno estadounidense. La United Fruit Company podía influir en generar estabilidad o inestabilidad en los países donde operaba. También, jugó un papel central en el golpe de Estado de Guatemala en 1954, defendiendo sus intereses en la propiedad de la tierra.

Como ha revelado la Deutsche Welle Chiquita Brands financió a paramilitares en Colombia. Su historia está manchada de sangre desde que operaba como United Fruit Company. En 1928, esta empresa estuvo en el centro de una masacre cometida por el Ejército colombiano a trabajadores en huelga. Conocida como la masacre de las bananeras, la misma que dejó un número indefinido de muertos.

Tropas paramilitares de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC) entrenan en las montañas cercanas al Catatumbo, en Colombia
Tropas paramilitares de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC) entrenan en las montañas cercanas al Catatumbo, en Colombia, el 29 de enero de 2000. Fotografía: Carlos García/AFP vía Getty Images

Veredicto contra Chiquita Brands: hito en la defensa de derechos humanos 

En junio del 2024 se configura un hito fundamental en la lucha y defensa de los derechos humanos. Después de varias décadas de litigio, por primera vez en EEUU un jurado declara responsable por su complicidad en abusos contra los derechos humanos en otro país, a una corporación estadounidense. El veredicto determina que Chiquita Brands empresa que financió a paramilitares en Colombia, tiene responsabilidad en 8 asesinatos cometidos por paramilitares en Colombia. Es decir al grupo terrorista Autodefensas Unidas de Colombia-AUC. El veredicto a favor de las víctimas determina que Chiquita Brands tiene que pagar a 8 de los 9 demandantes una indemnización de entre 2 y 2,7 millones de dólares. Por el motivo de financiar entre 1997 y 2004 a las AUC, responsables de asesinatos en la zona de Urabá.

Chiquita Brands pagó a paramilitares

En el 2007, como afirma la Deutsche Welle: la multinacional Chiquita Brands fue investigada por el Departamento de Justicia de EEUU. En esa ocasión admitió ante un tribunal federal haber pagado 1,7 millones de dólares a las AUC. Señalando que fue para proteger a sus trabajadores. Las autoridades estadounidenses le impusieron una multa de 25 millones de dólares, pero este dinero no fue destinado a las víctimas. Cómo ha difundido a nivel internacional la BBC sobre este caso: Chiquita señala que comenzó a hacer los pagos luego de que el líder de las AUC en aquel momento, Carlos Castaño, insinuara que el personal y las propiedades de la empresa podrían sufrir daños.

Reserva el Nogal / Gestión huella hídrica
Reserva el Nogal / Gestión huella hídrica – Foto Chiquita brands

Afectación a los derechos humanos

Según Earthrights International la multinacional Chiquita Brands financió a sabiendas a las AUC, con el fin de obtener ganancias. A pesar de los atroces abusos contra los derechos humanos de las AUC. La multinacional pagó más de 1,7 millones de dólares en financiación ilegal a las AUC entre 1997 y 2004. Así, Chiquita contribuyó a sufrimientos y pérdidas indecibles en las regiones colombianas de Urabá y Magdalena, incluidos los brutales asesinatos de civiles inocentes. 

Por otro lado, según el informe de sostenibilidad de Chiquita Brands desde 1990 se han comprometido en ayudar a crear un cambio en las regiones agrícolas donde operan. Mediante un enfoque de responsabilidad corporativa, tienen 100% de terrenos sostenibles certificados y 400 hectáreas reforestadas. Desde el 2015 esta multinacional ha implementado una estrategia de sostenibilidad. Se basa en 3 pilares: el código agrícola, ser un buen vecino y por el bien común. Sin embargo la historia de sus litigios legales muestra evidencia contundente que la sostenibilidad ambiental de Chiquita Brands no incluyó derechos humanos para todos.

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