¿Cuál es tu coche favorito?
Desde que se creó el primer automóvil a fines de 1800, la elección disponible se ha ampliado. Tal vez de niños jugábamos con coches a control remoto. Pero ¿quién hubiera pensado que un coche con baterías se convertiría en una realidad?
Sí, estamos hablando de coches eléctricos.
Hemos oído hablar mucho de ello en los últimos años; sin embargo, se sorprenderá al saber que este tipo de automóvil fue diseñado por primera vez por Thomas Edison. A lo largo de los años, su idea ha sido retomada varias veces, pero siempre archivada porque los automóviles de combustión eran más rápidos y fáciles de manejar. Como entonces, el problema tan discutido en estos autos es precisamente la producción de la batería y su eliminación.
Producción
Aunque un vehículo eléctrico es menos contaminante que un coche de combustión, hay que decir que su producción es un 80% más contaminante que la creación de un coche tradicional.
Los principales materiales utilizados para crear estas baterías son principalmente litio y cobalto.
El litio tiene una capacidad térmica y eléctrica como pocos otros metales y se extrae de las minas. Las minas más grandes se encuentran en Chile y Argentina.
Su extracción puede durar de 8 meses a 3 años y requiere una gran cantidad de agua. Se estima que se necesitan casi 2 millones de litros de agua dulce para obtener una tonelada de litio.
Fácil de adivinar lo que esto significa.
Los que sufren son los agricultores locales que tienen una pérdida considerable de agua para ser utilizada en la agricultura.
Además, el proceso de filtrado produce sustancias tóxicas y contaminantes.
El cobalto, por otro lado, se utiliza para extender la vida útil de las baterías de litio y se necesitan unos 10 kg para cada automóvil.
Su extracción produce residuos tóxicos que pueden contaminar las aguas subterráneas y el aire.
El Congo es actualmente el país con más reservas de las que proviene al menos el 50% del cobalto utilizado en el mercado mundial.
Hay mucha discusión sobre el trabajo utilizado para la extracción que a menudo está compuesto por niños. En algunos casos, además, trabajan con sus propias manos y sin herramientas de seguridad.
Afortunadamente, comenzaron a realizarse estudios, investigaciones y prototipos para reducir sistemas de producción tan agresivos. Empresas como Stora Enso están creando baterías a partir de árboles.
Desecho
La eliminación de la batería es un tema controvertido.
Por el momento es más caro reciclar litio que extraer uno nuevo. Además de litio y cobalto, las baterías están compuestas de níquel y manganeso, elementos altamente contaminantes. Para no causar daños al hombre y al medio ambiente, existen instalaciones especializadas para la eliminación de estos elementos por un costo que sigue siendo muy alto en este momento de aproximadamente 4/4, 5 € por kg.
La alternativa a la eliminación o el reciclaje de baterías sería la reutilización para otros fines. Las baterías gastadas todavía contienen un residuo utilizable, de ahí la idea de explotarlas, por ejemplo, para iluminar las calles de la ciudad.
Una empresa italiana, AraBat, ha decidido utilizar el ácido cítrico contenido en la cáscara de naranjas y limones en lugar de reactivos químicos altamente contaminantes para recuperar los materiales dentro de las baterías.
Cada año que pasa las ideas para respetar el medio ambiente evolucionan y mejoran, sobre todo gracias a la creciente sensibilidad y deseo de proteger nuestro planeta.
Por el momento, el uso de automóviles eléctricos es definitivamente más ecológico en comparación con el uso de automóviles tradicionales, pero la producción y la eliminación plantean nuevas preguntas. Afortunadamente, hay y habrá empresas como AraBat, capaces de reducir al mínimo el impacto negativo para hacer que el uso de automóviles eléctricos sea cada vez más ventajoso en cada etapa de su producción, uso y eliminación.
