Junto con la feria Supersalone del mobile 2021 y el frenesí por los cautivadores eventos que (como ya hemos comentado aquí) la han acompañado este año, queremos aprovechar la ocasión para detenernos en una forma de hacer diseño aparentemente más humilde, tanto como más comprometida con la sostenibilidad. Lo hacemos examinando el compromiso con el diseño responsable con el que una joven pareja de diseñadores se está abriendo camino. Juntos, y no por casualidad, han optado por identificarse con Poco Disegno, ¡pero mucha dedicación al hombre y a la materia!
¿Quiénes son Poco Disegno y cómo nacen?
Con sede en Moncalieri (TO), Poco Disegno es un estudio de diseño industrial emergente fundado por Gianluigi Frezzini y Fabrizio Gagliano con el ingenuo objetivo de llamar la atención sobre un concepto de diseño que reafirme su función como herramienta para mejorar la vida cotidiana. Convencidos de que el diseño industrial tiene el poder/deber de impulsar el progreso cultural, social y, ahora más que nunca, medioambiental, los dos diseñadores piamonteses emprenden un camino nada fácil en un sector que no ha podido resistirse al encanto de la Instagrammabilidad.
De hecho, siempre se sintieron atraídos por el enfoque humanista de los proyectos nacidos de la simple percepción de lo ordinario, analizando trivialmente los cambios sociales. A continuación, cultivaron la actitud de “diseñar para mejorar” desde su época postuniversitaria, cuando empezaron a realizar sus proyectos académicos reeditándolos y creando prototipos. En efecto, desde el principio se dieron cuenta de que el diseño contemporáneo estaba careciendo de contenido válido, en favor de ejercicios formales estériles. Por el contrario, decidieron volver a centrar la atención en las necesidades y, sobre todo, en los temas de la contemporaneidad.
El suyo es, por tanto, un arduo intento de desplazar el foco de una disciplina cada vez más asociada a cuestiones de estilo hacia una estética impregnada de valores compartidos.
Pero, ¿cómo persigue Poco Disegno la misión de diseñar de forma responsable?
Innanzitutto incentrando il processo progettEn primer lugar, centrando el proceso de diseño en un enfoque antropológico. No es casualidad que Gianluigi y Fabrizio apunten a la esencia en todos los proyectos en los que participan. Es a través de la eliminación de lo fútil, de hecho, que el joven estudio persigue el objetivo que de hecho lo distingue. Responder a los principales problemas que afectan el contemporáneo, omo la sobreproducción, la contaminación de los procesos logísticos y el fast-shopping. Con ello, pretenden fomentar un tipo de innovación que tiene un impacto positivo en varios frentes.
Así, al identificar primero todos los posibles requisitos funcionales de un objeto, como la usabilidad; los procesos de fabricación; la durabilidad y el ciclo de vida, permiten que las ideas evolucionen y no surjan de la nada. Además, al seguir todo el proceso de investigación, desarrollo y producción, con el apoyo de expertos dedicados a los que recurren de vez en cuando, consiguen que los productos acabados en el mercado con la firma Poco Disegno sean tan relevantes como coherentes con su enfoque. Esto se debe a que, para cuidar de los demás, es necesario comprender en profundidad cuáles son las exigencias actuales. Sin dejarse llevar por las convenciones establecidas.
¿Cómo se traduce en la práctica este enfoque responsable del diseño?
El ejemplo más explícito del modo en que Poco Disegno materializa la invitación a repensar nuestra relación con los objetos es U211, el paraguas por la vida. Los paraguas son accesorios pequeños y baratos, por lo que se consideran desechables. También porque se rompen con reconocida facilidad. Entonces, ¿cómo podrían mejorar el diseño de un producto que siempre ha permanecido inalterado?
Trabajando con el Ombrellificio Torinese, un pequeño taller que durante cinco generaciones se ha dedicado a garantizar la durabilidad de los paraguas con hilos de alta tenacidad y costuras de cuatro capas, se dieron cuenta de que el verdadero problema eran las juntas. Si rompes uno, puedes dañar todo el mecanismo y tener que comprar un paraguas nuevo. Además, reciclar el antiguo no es un proceso tan trivial. Hay que separar los distintos componentes y tener en cuenta los pegamentos que los mantienen unidos.
Así, tras un largo proceso de investigación y comparación con varias empresas, entre ellas Appiani, introdujeron en el mercado un paraguas duradero y fácil de reparar. Esto es gracias a un mecanismo que evita el uso de pegamento y se basa en sólo dos tornillos. Una que fija el mango y la otra para el mecanismo. De este modo, el U211 es totalmente desmontable y sus componentes pueden sustituirse fácilmente. Pero eso no es todo. Además, cada elemento es reciclable. El vástago es de aluminio, el mecanismo es de plástico PET (tereftalato de polietileno, un poliéster 100% reciclable) y la cubierta de tela reciclable. Esto es lo que significa diseñar objetos pensados para durar y ser reparados indefinidamente.
¿Y cómo consigue Poco Disegno tales resultados en el sector del mueble?
Parece que no. Al contrario, su colección Stacky demuestra que, en virtud de una marcada sensibilidad por la sostenibilidad, es posible y acertado innovar sin contaminar, pero con un profundo respeto por el hombre y el medio ambiente.
Junto con Plart, una marca de objetos de polietileno perteneciente al Grupo Cornaglia, Poco Studio ha creado de hecho una familia de muebles apilables en moldeo rotacional (rotomoldeo) que optimiza el espacio de envío, reduciendo así los costes y la consiguiente contaminación. Para los inexpertos, el polietileno es un material no tóxico; 100% reciclable; resistente a las bajas y altas temperaturas, a los impactos y a la luz solar. Sin embargo, los productos rotomoldeados suelen requerir mucho espacio para su envío debido a su tamaño. No es de extrañar que este proceso se aplique sobre todo a los suministros para exteriores.
Los dos diseñadores, por tanto, mantuvieron en el diseño sólo las superficies y los componentes necesarios para cumplir las funciones a las que estaba destinado el mueble. Además, hicieron que todo el volumen fuera apilable. Al biselar los bordes, han dado estabilidad a la estructura de plástico y han mejorado la calidad percibida.
Pues, ¿no ha llegado el momento de que toda la industria del diseño aúne definitivamente estética, beneficio y ética?
Sin ceder a las tendencias y estilos, Poco Disegno demuestra que la fusión de practicidad, estrategia, poesía y sostenibilidad está lejos de ser inalcanzable. Al defender visiones que a veces van a contracorriente, pero que son capaces de dar nuevos significados a nuestro comportamiento cotidiano, están consiguiendo orientar a más empresas hacia una producción más cuidadosa y al mismo tiempo rentable.
Al fin y al cabo, tomando como principal modelo de referencia las producciones Danese de los años sesenta, que, para quienes tuvieron la oportunidad de conocerlas, eran portadoras de un contenido significativo resuelto con una forma minimalista, Poco Disegno da mucha más importancia a un enfoque de diseño sagaz que al simple diseño de objetos maravillosos.
Por eso el diseño para ellos es mucho más que una actividad de consultoría. El trabajo de Poco Disegno es una forma de hacer una pequeña contribución a la evolución que nos ve a todos como protagonistas y al mismo tiempo implicados, en deuda e imprescindibles.