Hasta ahora hemos hablado de muchos artistas que se encargan de temas medioambientales. Obras creadas con objetos reciclados, un bloque de hielo de 1.400 kg que se derrite bajo el sol veneciano, e incluso un breve recorrido por la historia del arte contemporáneo con Kurt Schwitters. Hoy está en el centro la ética social contemporánea.
Las innumerables obras de los artistas y las mencionadas anteriormente, pueden considerarse sinónimos evocadores, que intentan sensibilizar al «público» que nos rodea. De hecho, el término sostenibilidad tiene amplios significados, a primera vista lo traemos de vuelta a las ciencias ambientales, pero también se refiere a otros temas de no poca importancia, entre ellos la ética del bien y el mal y lo social. Su «historia» y su uso (del término sostenibilidad) fueron introducidos durante la primera conferencia de las Naciones Unidas sobre el medio ambiente en 1972. Más tarde se definió el objetivo del desarrollo sostenible. Con un perfil de contenido ambiental bien definido.
Saman Oskouei e Sasan Oskouei
La visión de los dos artistas: única y esencial
Hoy hablaremos de dos artistas, Saman Oskouei y Sasan Oskouei, originarios de Tabriz, una ciudad del norte de Irán, ahora trasladada a la “Big Apple”. Decididos a dejar su huella en lugares del mundo y en las calles urbanas, para hacer retumbar sus ideas en la cabeza de los transeúntes. Los dos hermanos se embarcan en nuevas perspectivas conceptuales, con focus: invitación a la reflexión.
ICY y SOT abarcan los temas más esenciales que caracterizan nuestra época, incluidos: los derechos humanos, las condiciones humanas de hoy, los derechos de las mujeres, las dificultades de los migrantes y refugiados, y el cambio climático, son algunos ejemplos.
El fuerte impacto visual viene dado por el uso de materiales que recuerdan particular y claramente algunos hechos históricos. Las latas de aceite son sinónimo de capitalismo, alambre de púas y hierro es lo mismo que prisión, las viejas palas oxidadas son una imagen fija de la esclavitud y la libertad robada. Todo esto da vida a una nueva perspectiva, en un relato imparcial compuesto de obras que recuerdan al Land Art, con un tono poético casi como un canto de la fragilidad, simplemente reflejándose a través de esta maravillosa forma de expresión que es el arte, la ética social de los dos artistas.
Tras la cumbre del 23 de septiembre de 2019 que tuvo a la joven activista Greta Thunberg como protagonista indiscutible. A modo de ejemplo, sus palabras fueron el trasfondo de los nuevos trabajos de ICY y SOT y muchos otros. Una instalación inspirada en el trabajo de la activista y el movimiento ambiental global que inició.
Un video invertido, y una voz, la de Greta.
En la obra «Our House is on Fire»
<<I want you to panic, I want you to feel the fear I feel every day. And then I want you to act, I want you to act as if you would in a crisis. I want you to act as if the house was on fire, because it is>>
Nuestra casa está en llamas, exactamente.
Los dos crearon el marco de una casa típica pero sin paredes, una puerta y una ventana a la naturaleza en un lugar fascinante, California.
Nature’s Reflection
Una instalación efímera con un sabor conceptual de interpretación libre, que sin duda invita a la reflexión. En un paisaje pastoral, una silueta humana hecha con un espejo refleja el cielo en constante cambio, la luz, las nubes y el sol. De forma inusual, se destaca en un césped verde limpio. Una figura no identificada, tendida en la hierba, un gesto seguramente deseado que emana tranquilidad a los espectadores.
Encontraremos una instalación similar realizada por ICY & SOT en Noruega, en una forma flotante hecha de plástico llamada «Human Reflection on ocean». La ética social de ICY y SOT no se detiene ahí, si no que está presente en muchas otras obras. Aquí, su sitio web oficial.
Para tu información, en 2019 se unieron a la exposición en el Moco Museum de Ámsterdam, nada menos que a Andy Warhol y Bansky.
Entre los artistas que se preocupan por estos temas, también está Thomas Dambo. Lee su historia aquí.
