Para visualizar el futuro en el diseño, es importante recorrer la linea del tiempo a través de la historia del arte y de la creación. Un rastro que nos permita informarnos acerca de cómo las revoluciones pasadas influyeron en aquello que está sucediendo en la actualidad. Una influencia actual que abre el camino a lo que sucederá al futuro en el campo creativo.
Grandes revoluciones del pasado
Desde finales del siglo XIX, muchos artistas encontraron la necesidad de crear un nuevo tipo de expresión que incluyera los cambios fundamentales que se estaban produciendo en la tecnología, la ciencia y la filosofía.
La accesibilidad de otras culturas también sugería la posibilidad de describir la experiencia visual de formas alternativas.
Estos nuevos lenguajes encontraban sus fuentes de inspiración, extrayendo argumentos teóricos que reflejaran las inquietudes sociales e intelectuales de las culturas occidentales de la época.
Desde el inicio de los años ’20, la humanidad inicia a experimentar revolucionarios movimientos artísticos como el Abstraccionismo, el Neo-plasticismo, la Vanguardia Rusa y la Bauhaus. Todas iniciativas innovadoras que han dejando un trazo visible para generaciones venideras que continuarían conservando y evolucionando estos conceptos del diseño hasta la actualidad.
La Bauhaus es uno de los movimientos de finales del siglo XIX e inicios del siglo XX más revolucionarios y visionarios de su época.
El movimiento más vanguardista del siglo XIX, tenía como idea básica formar a una nueva clase de artesanos-artistas que combinaran la búsqueda de la forma estética con la funcionalidad práctica. Esto con un aprovechamiento de la industria y la tecnología.
Se trataba de estudios proyectuales basados en la interdisciplinariedad cuyo objetivo era fabricar objetos de todo tipo, explotando disciplinas de todo tipo para construir «el edificio del futuro».
Hubo inventores visionarios que crearon y conformaron la Bauhaus, tales como: Walter Gropius, Vasili Kandinski o Marcel Breuer. Fueron los promotores del estudio de las disciplinas como el arte, la arquitectura y el diseño, dentro de la escuela que llevaría su mismo nombre.
Esta academia creada bajo una dictadura nazista, logra dejar un legado historico de conceptos fundamentales para lo que hoy llamaríamos el diseño contemporáneo.
Su rastro en la actualidad
Actualmente, el diseño es uno de los pilares maestros en cualquier sector de la economía. Por este motivo se dedica muchísimo tiempo a analizar los valores técnicos internos y las features que definen los productos por fuera.
El diseño idóneo de hoy en día, no es solo un objeto con estéticas proporciones y que empatiza con el usuario final. Es también una poderosa herramienta que aporta un gran avance y un enorme valor añadido a las personas, a la industria y a la economía.
El buen diseño actual propone mejorar el impacto en el medioambiente y debe estar cada vez más alineado con la transformación digital.
Es una realidad que por el modelo económico actual, limita aún el poder desarrollar proyectos más sostenibles para el medio ambiente. Está evolucionando rápido, pero aún queda mucho por avanzar.
Pensar sostenible significa cambiar, en muchos casos, modelos de producción, de distribución y hasta de consumo. Y, todavía, para los industriales esto conlleva sobrecostes imposibles de asumir.
El desafío futuro para los diseñadores, es la apuesta a la creación de productos disruptivos que cuiden el medio ambiente, demostrando que se obtendrán más beneficios a medio y largo plazo.
El futuro en el diseño
Antes de buscar respuestas a cómo será el futuro en el diseño, valdría la pena focalizarnos en las personas que lo hacen y lo harán posible entendiendo como ha cambiado la perspectiva de los diseñadores de hoy, para las creaciones futuras.
Esta declaración nos lleva a otro punto interesante: el valor de involucrar en la creación de objetos el ecodiseño y el cuidado por el medioambiente. Es decir, hay que cuidar del desarrollo y realización de proyectos innovativos que puedan conectarse con la sostenibilidad.
El futuro en el diseño será el campo donde se produzcan grandes proyectos innovativos, que continúen siendo un instrumento fundamental para la industria.
Será el espacio para iniciativas que desarrollen productos inteligentes, viables en cuanto a fabricación y funcionamiento, acordes con las últimas tendencias del mercado. Será el lugar para los gustos de nuevos mercados, alineados a las nuevas exigencias sociales y medioambientales.
Es imprescindible visualizar el futuro en el diseño con las implicaciones de las tecnologías empleadas y generadas en el presente. Se debe analizar cómo seria su impacto material, ecológico y social en tiempos venideros.
Dos ejemplos disruptivos y visionarios
Minus
La marca Noruega de diseño de mobiliario Minus es un ejemplo disruptivo que nos permite visualizar el diseño en el futuro. Minus busca revolucionar el sector del diseño interior ofreciendo muebles con cero emisiones de carbono, mediante suscripción.
El objetivo de la marca es ir «más allá de cero» desarrollando productos de madera que sean carbono-negativos durante su vida útil.
Esta disruptiva apuesta llevó la marca a desarrollar un modelo de servicio de alquiler. Lo cual involucra a sus diseñadores en la creación de productos con una perspectiva de vida útil de 100 años.
El proyecto tiene como propuesta el comprometerse con la responsabilidad de que los productos una vez fuera de la fábrica, se aseguren una permanencia de uso del mayor tiempo posible, con un reciclaje del producto hasta el final de su vida útil.
En el mundo occidental, una silla suele durar 10 años. Si la madera tarda 100 años en crecer, ahí hay un desequilibrio. Es un 90% de deforestación.
Se trata de controlar el material, eso nos lleva a la suscripción, porque nos permite responsabilizarnos de la vida útil del material».
Kristian Notland Harnes CEO y Cofundador de Minus
La marca ha producido en su colección un taburete, un banco y una mesa, todos fabricados en madera de pino.
Cuando las piezas dejen de ser útiles, Minus las recuperará y las convertirá en una sustancia similar al carbón vegetal llamada biocarbón. Es una sustancia que estabiliza el carbono contenido en la madera y evita que se libere a la atmósfera.
El resultado será un tipo de fertilizante que puede aplicarse a los suelos para capturar más carbono.
Ori Systems
La marca de diseño constructivo Ori Systems, se ha propuesto de manera visionaria crear un nuevo movimiento en la vida urbana. El objetivo de la marca es que la gente pueda vivir donde quiera, sin renunciar al espacio y a la funcionalidad que necesita.
La premisa de Ori Systems es que los espacios deben ampliarse y adaptarse a nuestras vidas y no al revés.
Si analizamos nuestras casas, veremos que sus diseños apenas han cambiado durante los últimos siglos.
Nos enfrentaremos a nuevos retos que transformarían un hogar del siglo XX a uno nuevo a medida que avance el siglo XXI.
Hassier Larrea CEO de Ori Systems
A medida que avance el siglo comenzaremos a ver una nueva tipología de casas concebidas por diseñadores, como se concibe un objeto fabricado en serie.
Gracias a la economía de escala, las casas futuras serán más asequibles para las nuevas generaciones, ya que muchos no podrán pagar los precios actuales. Podrán ser más sanas, más eficientes, más compactas, más seguras, más interconectadas, más autónomas y en definitiva más sostenibles.
Además, es muy posible que cambien de forma autónoma su configuración, según la hora del día o las necesidades puntuales. También puede que podamos transportarlas en nuestros cambios de zona de residencia, o incluso, que paguemos solo un uso por horas vía APP.
Los creativos que se dedican a desarrollar proyectos de diseño e innovación para el futuro, hoy se preocupan por adquirir más conocimientos en biodiseño. Profundizan en colaboraciones con equipos multidisciplinares.
Estos diseñadores de nuestra contemporaneidad, se especializan en el campo de diseño de servicios o de transición para tener una visión más holística del contexto. Se concentran en el objetivo de promover un cambio social para vivir en equilibrio con nuestro planeta.
Nuevos inventores que tienen en sus manos una nueva revolución. Y, es, la de crear proyectos de diseño innovativos que protejan el medio ambiente a futuro.
