La difusión de la energía fotovoltaica promete una dependencia cada vez menor de los combustibles fósiles. Pero la instalación de parques solares convencionales es cara, sobre todo por el elevado coste del terreno sobre el que se construyen. Para superar este inconveniente, se ha pensado en plataformas flotantes. Actualmente, en China, el parque solar flotante Dezhou Dingzhuang, de 320 megavatios, es el mayor parque solar flotante jamás construido.
En un estudio del Laboratorio Nacional de Energías Renovables de Estados Unidos (NREL) se hicieron algunas predicciones. Se estimó que la instalación de un parque solar flotante, en los más de 24.000 embalses de Estados Unidos, podría producir alrededor del 10% de la producción anual de electricidad del país.
Ventajas
El parque solar flotante funciona de forma muy similar a las instalaciones solares clásicas, salvo por su ubicación. En este caso, los paneles solares se fijan a estructuras flotantes para mantenerlos a flote en la superficie de una masa de agua. Las instalaciones suelen ubicarse en embalses. Por ejemplo, embalses de plantas de tratamiento de aguas residuales, depósitos de agua potable o centrales hidroeléctricas.
La investigación sugiere que los paneles solares pueden funcionar de forma más eficiente cuando flotan en la superficie del agua. Aunque los investigadores subrayan que es necesario seguir investigando.
Mayor eficacia
Sin duda, el parque solar flotante puede generar más energía que su homólogo terrestre. Esto se debe a los efectos refrigerantes del agua. La proximidad del agua ayuda a que los paneles solares se mantengan frescos. Y esto les permite absorber más energía solar. Los investigadores han calculado que cubrir el 10% de las cuencas hidroeléctricas del mundo con parques solares flotantes podría generar tanta electricidad como todas las centrales de combustibles fósiles en funcionamiento del mundo juntas.
Lo que vemos es que cuando los paneles se colocan sobre el agua, esencialmente aumentan su eficiencia. Pues el agua permite bajar la temperatura de funcionamiento de los paneles.
Desventajas
Por supuesto, el uso de esta tecnología también presenta desventajas. Una de ellas es que actualmente la tecnología solar flotante cuesta más que la terrestre, aunque en general sea más práctica para su aplicación a gran escala. En efecto, el sistema de soporte de los paneles debe ser muy resistente tanto a la corrosión como a los esfuerzos mecánicos. Por lo tanto, tener un coste de construcción y unos costes de mantenimiento más elevados suele corresponderse con tener una vida útil más larga.
Gran impacto en el ecosistema
Además, el parque solar flotante puede tener diferentes impactos en el ecosistema. La energía solar flotante se instala en masas de agua muy diferentes y en muchas regiones climáticas distintas. Esto puede hacer más compleja la evaluación del impacto ambiental. El diseño de un parque solar flotante requiere cuidadosos estudios de viabilidad.
Tampoco está claro cómo el plástico y los metales de los mecanismos flotantes afectarán la calidad del agua. O si afectan al crecimiento de las algas y al ecosistema en general.
Los paneles utilizados en el parque solar flotante deben tener unas características específicas. Deben ser a prueba de polvo, sin plomo, muy resistentes a la humedad y estar bien protegidos del agua.
Parques solares flotantes
Hay varias instalaciones de paneles fotovoltaicos flotantes en todo el mundo. Desde China hasta Estados Unidos. La mayor instalación fotovoltaica flotante de América se encuentra en Sayreville (Nueva Jersey). Y están previstas muchas más. Por ejemplo, California tiene previsto poner en marcha un proyecto piloto para revestir canales de riego con paneles solares flotantes. Muchos agentes implicados en la producción y distribución de energía están considerando la posibilidad de instalar parques solares flotantes. Esta nueva solución fotovoltaica bien podría ser el futuro de la energía solar.
Para más información: Floating Solar Panels
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