Ofrecer sostenibilidad como propuesta de valor en las marcas se está convirtiendo en un requisito imprescindible. Un 67% de los españoles reconoce tener en cuenta la sostenibilidad a la hora de comprar productos de una marca. Por lo tantoes un valor a tener en cuenta, ya que es una gran motivación para los clientes.
Propuesta de valor
Una propuesta de valor es una promesa por parte de la empresa hacia el cliente, a cambio de que este compre su producto o servicio.
Según Philip Kotler, gran referente en estrategias de márketing, hay que tener en cuenta la importancia de la sostenibilidad como propuesta de valor. Es un factor clave para mejorar la imagen corporativa pero también como motivación para el cliente.
Kotler apoya los siguientes valores:
- Un producto/servicio inspirado por principios sostenibles.
- Una oferta que tiene en cuenta el medio ambiente.
- Proceso de fabricación sostenible y barato.
- Beneficios para el planeta.
- Reforzar la conciencia ecológica.
- Crecimiento personal.
Una propuesta de valor también expone las ventajas que el cliente obtendrá al elegir la marca. Esta debe ser accesible para los consumidores o compradores, y se define pensando en las necesidades o problemas de los usuarios, marcando al diferencia con la competencia.
La realidad
Pero moda sostenible no es sólo consumir moda responsable, reciclada o ecológica.
En 2009, el Instituto Danés de Moda celebró una de las primeras cumbres de moda sostenible en Copenhague.
Según el New York Times en su artítulo Redefining ‘Sustainable Fashion’, ahora muchas marcas de moda, desde el mercado masivo hasta el lujo utilizan la sostenibilidad en sus planes estratégicos. La sostenibilidad también es usada para mejorar la imagen de la empresa y su posicionamiento.
En 2018, el organismo de cambio climático de la ONU publicó el Fashion Industry Charter for Climate Action, hablando de objetivos como el logro de cero emisiones de carbono para 2050.
En 2019 se creó el Fashion Pact, donde marcas de la industria textil se comprometen a parar el calentamiento global, restaurar la biodiversidad y proteger los océanos.
Todos estos actos de compromiso por parte de las marcas debe ser investigado, para comprobar que realmente se cumple.
Por eso tenemos que tener cuidado y no caer en el greenwashing. En este link encontrarás un artículo de The Green Side of Pink hablando sobre qué es y cómo evitarlo.
El mito de la moda sostenible
Como Kenneth Pucker defiende en su artículo para Harvard Business Review, pocas industrias promocionan y defienden la sostenibilidad como es el caso de la industria de la moda, aunque en estos últimos 25 años no se haya conseguido reducir el impacto que esta ha casusado en el planeta.
Es cierto que ha existido un desconocimiento global del impacto negativo de la producción textil hasta práctimante el siglo XXI, ya que este sector se ha centrado principalmente en el consumismo, la producción en masa y el fast fashion, siendo un sector muy minoritario de slow fashion y concienciación del consumo. Un 10% de las emisiones globales de carbono pertenecen a este sector.
¿Cómo saber si las marcas cumplen?
La moda sostenible debe ser clara, ofreciendo buena comunicación sl cliente sobre la marca y los productos. Para ello es clave que exista transparencia por parte de las marcas. Eso implica publicar toda la información sobre cada parte del proceso de producción y así poder garantizar la trazabilidad de las prendas.
Por eso, la honestidad es imprescindible, para así poder tener la confianza de los consumidores. También debe haber orientación al cliente, que sea accesible y manejable.
Por otro lado también es muy importante contar con calidad e innovación en los productos, para que sean llamativos y diferentes.
La marca también debe mostras responsabilidad social corporativa y profesionalidad.
En estos últimos años, la forma de producir, sobre todo pequeñas marcas, se basa en evitar el exceso de inventario y así no generar residuos. De esta manera se pueden beneficiar las dos partes, la marca y el medio ambiente.
Como consumidores es imprescindible leer e investigar sobre los lugares de fabricación y producción de las marcas, tipo de tejido y materiales y la propuesta de valor que quieren comunicar.
Generaciones jóvenes
Debe destacarse que es principalmente la generación Millennial la que se está encargando de promover esta investigación.
Los millennials, nacidos entre 1982 y 2004, son considerados pertenecientes a la generación digital, por lo tanto con un acceso a la información muy accesible.
Los pertenecientes a esta generación están cambiando el modo de consumir moda, ayudando a promover lo que se conoce como slowfashion. El objetivo de la ‘moda lenta’ es consumir moda de forma consciente, sin crear impacto negativo en la sociedad ambiental y social.
La sostenibilidad debería ser un valor indiscutible hoy en día en la producción textil ya que son los propios consumidores los que la demandan. Pero no debería ser un valor añadido al marca sólo por este motivo, si no por formar parte de ese pequeño porcentaje que está ayudando a combatir el impacto que supone la producción textil.
Que una marca prometa sostenibilidad como propuesta de valor y sea capaz de cumplirla proporciona a los consumidores tranquilidad y sobre todo credibilidad y confianza. Valores que no se pueden comprar.